Francisco Giner de los Ríos

Datos del autor

  • Nombre: Francisco Giner de los Ríos
  • Fechas: 1839-1915
  • País: España
  • Añadido a la biblioteca: 23 febrero 2018
  • Más información (Internet): En este enlace
    • Más información (en papel): Menéndez Pelayo: Historia de los heterodoxos españoles. T. III, México 1983; Abellán: «Francisco Giner de los Ríos: su ideario filosófico y pedagógico», en Historia crítica del pensamiento español, T. V. 1989; González Díaz: «Francisco Giner de los Ríos», en Rafael de Domingo (director): Juristas Universales, T. III, 2004, págs. 472 y ss.

Perfil histórico-biográfico

Fue un espíritu inquieto y reformador. Sus obras completas ocupan 20 tomos y contienen estudios de las más variadas ramas del pensamiento: el arte, la literatura, la psicología, la filosofía, la religión, la pedagogía y, por supuesto, también el Derecho. De hecho, Giner de los Ríos fue Catedrático de Filosofía del Derecho y Derecho Internacional en la Universidad Central; aunque no es por ello por lo que pasó a la historia de la intelectualidad española, sino por haber sido el fundador de la Institución Libre de Enseñanza así como de otras instituciones asociadas al aprendizaje y protagonistas, en gran medida, del renacimiento cultural español que tuvo lugar en el primer tercio del siglo XX, tales como el Museo Pedagónico Nacional, La Junta para la Ampliación de Estudios, las Colonias Escolares y la ya casi mítica Residencia de Estudiantes.

Nacido en Málaga, hijo de un funcionario de Hacienda, durante su infancia la familia trasladó varias veces su residencia, y así, su escolarización se inició en Cádiz, continuó en Alicante y terminó en Barcelona donde llegó a cursar el preparatorio para la Universidad, si bien sus estudios universitarios los realizó ya en Granada. Tras terminar sus estudios se trasladó a Madrid, donde ya había residido antes temporalmente y donde vivía su tío materno, Antonio de los Ríos Rosas, importante jurista y político español que, a lo largo del Siglo XIX, ocupó varios cargos públicos: fue diputado varias veces, miembro y presidente del Consejo de Estado, Ministro de Gobernación, e incluso llegó a presidir hasta en tres legislaturas distintas el Congreso de los Diputados. Una vez en Madrid obtuvo trabajo como agregado diplomático en el Ministerio del Estado y empezó a colaborar con la Universidad Central, donde, en 1867 obtuvo la cátedra de Filosofía del Derecho y Derecho Internacional.

Los primeros años de su vida académica no fueron, sin embargo, plácidos sino más bien lo contrario: bastante agitados; en parte por la época política que le tocó vivir, pero también por su fuerte compromiso ético y por su defensa de la libertad de enseñanza. Tomó posesión de la Cátedra el 13 de agosto de 1867. Pero en enero de ese mismo año se había aprobado el llamado «Decreto Orovio»; un Decreto que permitía al Gobierno controlar la pureza de la fe y la fidelidad a la Monarquía (en definitiva, la ortodoxia política) de los Profesores universitarios. Como consecuencia de dicho Decreto varios catedráticos fueron separados de su Cátedra, lo que motivó que en enero de 1868 Giner de los Ríos elevara al Ministerio una exposición en contra de tales separaciones y del Decreto que las posibilitaba, lo que, a su vez, provocó que en mayo de ese mismo año también a él se le suspendiera. Se le restituyó (junto con los demás profesores depurados) en octubre de ese mismo año, a consecuencia del cambio político conocido como «Revolución de Septiembre». En 1870 volvió a protestar, ahora ante las Cortes Constituyentes, porque se había separado a algunos Profesores que habían rehusado jurar la Constitución de 1869. Esta protesta no llegó a tener sanción, pero, pocos años más tarde, un nuevo Decreto atentatorio contra la libertad de Cátedra motivó una protesta más que condujo a que en 1875 se le separara nuevamente del servicio, hasta que en 1881 fue repuesto de nuevo, si bien en 1892 volvió a ser cesado hasta 1893. Desde entonces se mantuvo en activo hasta su fallecimiento. En 1912, cuando contaba 73 años de edad, solicitó declaración de aptitud para continuar en sus funciones, que fue informada favorablemente por el Rector de su Universidad y concedido por el Ministerio.

La Institución libre de enseñanza, fue fundada en 1876, época en la que, tal y como se acaba de indicar, Giner de los Ríos estaba separado del Servicio. La idea de esta institución se fraguó a consecuencia de la crisis de 1875: en aquella ocasión, no sólo se separó del servicio a algunos profesores disidentes, sino que también se les detuvo y confinó. Fue entonces cuando los confinados (Giner de los Ríos, Gumersindo de Azcárate, González de Linares y otros) comprendieron la necesidad en este país de una institución libre de enseñanza, la cual habría de servir, además, para poner en marcha una importante renovación pedagógica. La institución Libre de Enseñanza sirvió para todo eso. Y también sirvió para educar a los que más tarde fueron protagonistas de la gran renovación intelectual que en España tuvo lugar unos años después. El primer presidente de esta Institución fue Laureano Figuerola, pero éste pronto pasó el testigo a Giner de los Ríos que en 1880 fue nombrado Rector de la misma: Joaquín Costa, Leopoldo Alas, Gumersindo de Azcárate, José Ortega y Gasset, Gregorio Marañón, Ramón Menéndez Pidal, Antonio Machado, Joaquín Sorolla… casi todos los intelectuales de las postrimerías del Siglo XIX aplaudieron y apoyaron la iniciativa, lo cual generó un estado de opinión favorable que permitió a Giner de los Ríos compatibilizar su labor al frente de la institución con su trabajo como catedrático, una vez que en 1881 fue restituido en la Cátedra.

En el siguiente enlace puede verse la nota necrológica de la Revista de Derecho Privado, publicada en el número correspondiente a marzo de 1915. Y en este otro, el número de dicha revista correspondiente a mayo de 1915, en el que la sección doctrinal se dedicó integramente a recordar a Giner, sus teorías y sus clases magistrales.

Desde el punto de vista jurídico-doctrinal, Giner de los Ríos, como tantos otros intelectuales de su época, fue un krausista confeso, ya desde sus años de estudio de la licenciatura, en que pudo leer por primera vez a Krause, y más tarde, cuando anotó y tradujo al español la obra de Ahrens. Por lo demás su obra respondió a la multiplicidad de sus intereses intelectuales cosa que, por otra parte, es relativamente habitual en el Siglo XIX español. Entre sus aportaciones al conocimiento jurídico destacan sus «Estudios Jurídicos y Políticos», sus «Principios de Derecho Natural», así como su monografía sobre «La Persona Social». Todos ellos, y algún otro trabajo de índole jurídico, se incluyen en nuestra Biblioteca. También hemos incluido, de sus muchos trabajos en materia de educación y pedagogía, dos publicaciones que, aunque no tratan de un tema jurídico, estimamos de interés para los usuarios de esta Biblioteca, pues se refieren a la pedagogía universitaria, y a la misión de la Universidad propiamente dicha.

(Por Joaquín Ataz López).

Obras del autor en la Biblioteca Jurídica Digital Antonio Reverte

Orden Alfabético

En total, la Biblioteca Jurídica Digital Antonio Reverte almacena 12 volúmenes de Francisco Giner de los Ríos

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